martes, 17 de febrero de 2015

Jornada abierta PRH: Ser auténtico y respetuoso a la vez ¡es posible! (24-3-15)

Una nueva oportunidad de conocer la formación PRH que permite una visión global y constructiva de la persona, con una metodología para avanzar en el crecimiento personal.

A los que ya nos conocéis y sabéis de la eficacia de nuestra formación, os invitamos a traer a algún amigo/a, familiar, compañero/a de trabajo, etc.

Es necesario inscribirse, tanto el/la acompañante como la/s persona/s que venga/n a participar por primera vez, las plazas son limitadas.

domingo, 15 de febrero de 2015

Mi camino de crecimiento en PRH. Por Feli Ibáñez

Llevo varios años explorando mi mundo interior y mis relaciones a través de  PRH y me gusta que lo que aprendo:
  • Es de carácter internacional. Veo al mundo en su globalidad y me gusta que lo que hago tenga una traducción universal.
  • Dispone de una investigación consistente y experimentada respecto al crecimiento de la persona. Soy muy mental. Mi cabeza necesita comprender para avanzar. Tener una investigación que fundamenta el crecimiento y que demuestra que el método que utiliza es eficaz me tranquiliza.
  • Propone un método de autodescubrimiento original, basado en una gran parte en la escritura. Auto descubrirme a mi ritmo se encaja en mi dinámica de vida. Escribir acogiendo mi mundo interior, atenta a lo que vive en mí, me ordena, me sitúa, me permite conocerme mejor y por ello evolucionar. Me encaja como metodología.
  • Su centro son las personas y cree en ellas. Tiene fe en sus capacidades, cualesquiera que sean su situación, su historia, sus dificultades. Siempre he sentido que los seres humanos somos un pozo de maravillas, como decía Andrés Rochais "dormimos sobre tesoros, sobre pozos de energía, sobre un volcán de creatividad, sobre reservas increíbles de amor verdadero"  aunque a veces nuestras circunstancias, nuestra propia historia, nuestro sufrimiento nos condiciona y no nos deja brillar con todo nuestro potencial. Me gustaría poder brillar lo máximo posible y que los demás también lo hicieran. Aunque reconozco que todos tenemos límites y hay que reconocerlos y respetarlos.
  • Me da un modelo psicopedagógico teórico del funcionamiento de mí misma, sencillo y fácil de aplicar, y esto me permite comprenderme y situarme en la práctica cuando me pasan las cosas y no las entiendo (entro en crisis, percibo cosas que pasan a mi alrededor, sufro, me maravillo...).No me siento como un barco a merced del estado de las aguas.
  • Desde este modelo psicopedagógico me pone en relación con los otros y me enseña cómo me relaciono y la naturaleza de cada relación para gestionarla lúcidamente, entendiendo el impacto de esta relación. La humanización de la sociedad es un tema que me toca profundamente. No podemos hablar de humanización si no hablamos de relación con los otros.
  • Entra en el fenómeno del crecimiento, del avance hacia llegar a ser uno mismo lo más posible. Y lo que realmente me fascina es que nosotros podemos cooperar activamente en este proceso.
  • Se trabaja el sufrimiento y las heridas, que es uno de los aspectos que más me conmueve interiormente. Ésta ha sido una de mis mayores inquietudes en los últimos años: sanar las heridas que pudiera tener y que no me hacen feliz ni me dejan desplegarme completamente en quien soy.


A medida que se avanza en todos estos campos te vas ordenando por dentro (se coloca tu  puzle interior, la sensación de no entender nada de lo que te pasa por dentro desaparece, algunas reacciones que me dejaban insatisfecha se van, siento más lucidez para mis decisiones asumiendo el grado de inconfort, incertidumbre y/o frustración que llevan consigo, puedo vivir mi tarea, mi misión con gusto, pasión, felicidad y sentido, las relaciones se limpian en lo que a mí me toca y puedo ser asertiva en todos los sentidos, aprendo a escuchar las señales de mi cuerpo y entro un poco más en su sabiduría...), encuentras el sentido de tu vida y se libera una energía brutal motor de movimiento hacia los otros, hacia la sociedad.


YEHUDI MENUHIM, director de orquesta



Yehudi Menuhin, también conocido como Lord Menuhin of Stoke d'Abernon, fue un violinista y director de orquesta nacido en Estados Unidos, con nacionalidades de Suiza (1970) y británica (1985), de origen ruso (con ascendencia judía). Menuhin es considerado uno de los más grandes violinistas del siglo XX.

Presidió el Consejo internacional de música en la Unesco (de 1969 a 1975) y fue un activo defensor de causas humanitarias.

Recibió el Premio de la Paz de los libreros alemanes en 1979, en 1991 el Premio de la Fundación Wolf de las Artes de Jerusalén, en 1994 recibió una Condecoración Konex otorgada por la Fundación Konex (Argentina), y, junto con el ruso Mstislav Rostropóvich, el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia en 1997. Fue alumno de yoga de B. K. S. Iyengar, de quien decía que fue su mejor maestro de violín.

Este texto fue hallado entre los documentos de sus últimas voluntades:


A Ti, a Quien no conozco ni puedo conocer – ni en mi interior ni fuera de mí – y a Quien estoy unido por el amor, el temor y la fe – al Único en todas sus representaciones– dirijo esta oración:

Guíame hacia lo mejor de mí mismo – ayúdame a convertirme en alguien en quien confíen los seres vivientes, criaturas y plantas, así como el aire, el agua, la tierra y la luz que los sustentan; mantenme como alguien que respeta el misterio y el carácter de cada variedad de vida en toda su unicidad y solidez, ambas esenciales para la supervivencia de cualquier vida.

Ayúdame a preservar mi capacidad para maravillarme, extasiarme y descubrir; permite despertar en mí el sentido de la belleza en cualquier lugar, y a contribuir con y para otros y para conmigo mismo en el conjunto de la belleza que observamos, oímos, olemos, probamos o tocamos o que de algún modo concebimos a través de la mente y el espíritu; ayúdame a no perder nunca el vivificante ejercicio de proteger a todo aquél que respire, pase hambre, tenga sed; a todo aquél que sufra.

Ayúdame a permanecer acorde con los valores relativos, a equilibrar pacientemente el paso del tiempo con la rica cosecha de fidelidades, experiencia, éxito, ayuda e inspiración.

Ayúdame a ser un buen guardián del cuerpo que Tú me has dado. Que esta vida confiada a “mi” temporal resguardo, vuelva al círculo terrenal en la mejor condición posible para que la vida continúe. Así pues, Tu deseo se hará.


Que aquellos que me sobrevivan no lloren mi muerte sino que continúen siendo igual de serviciales, amables y sabios con los demás, igual que fueron conmigo. Aunque me encantaría vivir muchos años disfrutando de los frutos de mi afortunada y rica vida, con mi preciada mujer, familia, música, amigos, literatura y numerosos proyectos, en este mundo de culturas y gentes tan diversas he recibido ya la bendición, afecto y protección suficiente para satisfacer miles de vidas.

Y finalmente, mientras Te suplico que me protejas de la ira y la condena, la mía de los demás y la de los demás de mí, ilumínalos a ellos y a mí y ayúdanos a perdonarnos el uno al otro.

También con aquellos enemigos que posiblemente tenga, ayúdame a distinguir entre los reconciliables y los irreconciliables, dame ánimos para buscar por todos los medios el entendimiento con los primeros, y hacer a los segundos ineficaces y a aprender de los dos.


Dame la inspiración que has dado a la humanidad y anímame a reverenciar y a seguir estos ejemplos vivos que consagran tu espíritu – el espíritu que hay en el interior y fuera de cada uno de nosotros – el espíritu de Aquél y de Aquellos – la iluminación de Cristo, de Buda, de Lao-Tsu y de los profetas, sabios, filósofos, poetas, escritores, pintores, escultores, todos los creadores y artistas, y toda la gente desinteresada, los santos y las madres, conocidos y desconocidos, los exaltados y los humildes – hombres, mujeres, niños de todos los tiempos y lugares – cuyo espíritu y ejemplo permanecen con nosotros y dentro de nosotros para siempre.

NO VIVIR A RASTRAS...